¿Te habías imaginado alguna vez que las semillas de calabaza -que normalmente desechas- podían encerrar tantos beneficios para nuestro organismo?. Las semillas de calabaza tostadas tienen un sabor suave y dulce –similar a la nuez- con una textura masticable, pero sobre todo, son unas de las semillas más nutritivas que existen.
Promueve la salud de la próstata
Estudios afirmar en el aceite de las semillas de calabaza y las mismas semillas promueven la salud de la próstata. También contribuyen al tratamiento de la hiperplasia benigna de próstata. Un informe afirma que dicho alimento posee fitoesteroles, responsables de la reducción de la próstata.
Asimismo, contiene productos químicos que impiden la transformación de la testosterona en dihidrotestosterona (DHT), que se asocia con el agrandamiento de la próstata.
Contribuye a tu felicidad
La revista Shape dice que la L-triptófano presente en las semillas de calabaza mejoran el estado de ánimo. De hecho, se afirma que puede ser muy buena para combatir la depresión. Otra revista de la india dice que al consumir estas semillas varias horas antes de dormir, fomentamos una buena noche de sueño.
Como ves, son muchas las razones por las que debemos incluir este alimento en nuestra dieta alimenticia. Si todavía no tienes en casa, te recomendamos que salgas cuanto antes y la compres. De esta manera, siempre la tendrás a mano para comerlas cuando más te apetezca.
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